El rococó es un estilo artístico y arquitectónico que tiene su origen y desarrolló principalmente en el siglo XVIII, especialmente en el corazón de Europa, esto como una evolución del estilo barroco.
Caracterizado por su ornamentación exuberante, curvas elegantes y motivos decorativos delicados, el rococó se relacionaba con la opulencia y la sofisticación. Su última actualización fue en 2021, cuando se convirtió en tendencia, y ha llegado hasta nuestros días con esas características decorativas.
Si te gustaría conocer más sobre este estilo decorativo y la forma en cómo puedes llevarlo a casa, quédate hasta el final de este artículo que hemos preparado para ti y toma nota.
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Origen
Como lo mencionábamos anteriormente, el rococó es un estilo artístico y decorativo que tuvo su auge en Europa durante el siglo XVIII, especialmente en las décadas de 1720 a 1760. Este estilo decorativo es una evolución del Barroco tardío y se caracteriza por enfocarse principalmente en la elegancia, la ligereza y los detalles ornamentales.
Cabe mencionar que el término de "rococó" es derivado de la palabra francesa rocaille, la cual significa "conchas" o "rocas pequeñas", y "coquilles", que significa "conchas marinas". Este nombre refleja la predilección del estilo por la ornamentación naturalista inspirada en formas orgánicas como conchas, hojas, flores y elementos curvos.
Aplica el rococó moderno en casa
Si estás buscando sumar elementos del estilo rococó moderno en casa, podrías hacerlo a través de la decoración de interiores, muebles y detalles arquitectónicos. Algunas de las características que son clave del estilo rococó son las siguientes:
Ornamentación detallada
El estilo rococó se caracteriza por la profusa ornamentación, incluyendo hojas, flores, conchas y motivos naturales. Esto podría traducirse en muebles tallados, molduras decorativas en paredes y techos, y accesorios elaborados.
Curvas y líneas elegantes
Las formas rectas y rígidas son sustituidas por líneas curvas y asimétricas en el rococó. Esto se refleja en muebles con formas sinuosas y en la arquitectura con elementos curvos.
Colores suaves y pastel
La paleta de colores típica del rococó incluye tonos suaves y pastel, como rosa pálido, azul claro, verde menta y blanco crema. Estos colores pueden aplicarse tanto en paredes, como en muebles y diferentes textiles.
Detalles ornamentales en dorado
El dorado y otros tonos metálicos eran los más comunes en la decoración rococó, a menudo usados para resaltar detalles y aportar un toque lujoso.
Telas ricas en diseño
El uso de telas lujosas como la seda y el terciopelo era bastante común en el rococó. Estas telas pueden agregarse a través de cortinas, tapicería de muebles y cojines.
Espejos ornamentados
Los espejos grandes y ornamentados eran un elemento que sobresalía en el estilo rococó. Podrían estar enmarcados con detalles tallados y curvas elegantes.
Interpretación moderna
Hoy en día, los diseñadores a menudo reinterpretan y fusionan elementos del rococó con estilos más modernos para crear ambientes únicos y eclécticos que reflejan la historia y la modernidad.
Si te gustaría fusionar el estilo rococó con la estética contemporánea, podrías buscar diferentes alternativas de adaptar estas características a los diseños modernos y minimalistas. Recuerda que el resultado final dependerá mayormente de tu visión y creatividad para combinar elementos del pasado con las tendencias actuales.