Probablemente atesoras el recuerdo de un día soleado. ¿Alguna vez has pensado en sentir la luz y la energía de ese momento en el interior? Esto es lo que les pasa a quienes usan tonos de amarillo en su decoración. El color divide opiniones por su fuerza y exuberancia, sin embargo, si se usa de manera inteligente, puede ser perfecto en los más diversos escenarios.
Tomando en cuenta que cada vez están más presentes en los proyectos de decoración, los tonos amarillos transitan entre diferentes matices. Desde el manteca, pasando por el mostaza oscuro pasando por el dorado, forman parte de muchos proyectos decorativos. ¡No tengas miedo a equivocarte usando este tono! Si se usa con suficiente sofisticación, la armonía visual se encuentra garantizada, y para demostrártelo, te compartimos las principales razones que te convencerán de adoptar este ton en la decoración de tu hogar.
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Trae alegría al hogar
Los colores despiertan sensaciones. Y es que, según el Feng Shui, una antigua técnica china, este tono estimula nuestra energía y espontaneidad, además de despertar mucha vivacidad y alegría. El amarillo, en sus diferentes tonalidades, representa riqueza, poder y está intrínsecamente relacionado con el oro.
No importa en qué ambiente uses el color, seguramente hará que ese espacio sea más brillante. Precisamente por esto, no se suele utilizar en los dormitorios. Sin embargo, es una buena opción para la cocina, sobre todo si desayunas allí. No hay duda de que tu día comenzará más optimista y lleno de energía.
Ayuda a la concentración
Está comprobado. Los tonos de amarillo aumentan nuestra concentración. Por eso, son perfectos para el espacio donde los niños y jóvenes hacen sus deberes, como la sala de estudio, por ejemplo. Las oficinas también acogen muy bien este tono. Entonces, si trabajas desde casa, no dudes en adoptar este color.
Los tonos de amarillo resaltan otros colores
Al decorar, debes elegir la paleta de colores con cuidado. Y el amarillo aparece como un importante aliado, ya que combinado con otros matices ayuda a hacerlos más vivos y claros. Un ejemplo ya clásico es la mezcla con gris, que resalta la profundidad de este tono.
Sin embargo, otras combinaciones funcionan bien. El blanco, por ejemplo, se vuelve brillante y cualquier ambiente decorado de esta manera es más luminoso. Esta mezcla realza visualmente cualquier espacio y se usa mejor en una parte de su hogar que no recibe mucha luz natural.
El color es encantador como parte de los detalles
Para despertar las mejores sensaciones con el amarillo, no es obligatorio invertir en una decoración exuberante en la que el tono aparezca en todos los rincones de tu entorno. Grandes o pequeños, los accesorios y artículos en este matiz captan rápidamente nuestra atención. Por eso, aunque sea un pequeño detalle, cambian la energía de cualquier espacio y despiertan más alegría.
Un color protagonista
Si te apasiona el amarillo y quieres abusar del color en cualquier espacio de tu hogar, no te preocupes. Es posible acertar y conseguir la armonía estética que buscas.
Para conseguir el mejor resultado, apuesta por diferentes tonalidades de amarillo para componer un look interesante y encantador. En este sentido, además de paredes pintadas de color, invierte en complementos, incluidos los textiles, en este matiz.