Mantener su estufa libre de obstrucciones es esencial para cocinar de manera segura y eficiente, y esta por esta simple razón que en esta ocasión te queremos compartir en este artículo un par de consejos muy útiles para solucionar y evitar este problema de forma segura y práctica.
Quédate hasta el final de esta nota, y pon atención.
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Razones por las que los quemadores se tapan
Los quemadores de la parte superior y del horno de tu estufa pueden obstruirse por la acumulación de sustancias y alimentos que usamos en nuestro día a día.
En este sentido, los pequeños orificios por donde sale el gas pueden llegar a obstruirse por múltiples razones, entre ellas la suciedad, como restos de comida, grasa y fragmentos carbonizados. Por esta razón, de vez en cuando es necesario hacer una limpieza general.
Detecta si tus quemadores están obstruidos
Una de las señales de que los quemadores de la estufa se encuentran obstruidos es que salen de ellos una llama amarillenta o anaranjada. Esto se debe a que la llama que se produce al quemar gas suele tener tonalidades azuladas.
Por lo tanto, si detectas un cambio en el color de la llama de tu estufa, esto podría ser un signo de obstrucción.
Además, puede comprobar si hay obstrucciones visibles en los orificios de los quemadores. Y, en casos más extremos, olerá gas pero no podrá encender el quemador.
Desatasca los tapadores con esto
Como la obstrucción de los quemadores de una estufa por lo regular viene provocada por la acumulación de suciedad, la forma de desatascarlos es básicamente limpiarlos.
Entonces, uno de los pasos del proceso es, primero, reunir los siguientes elementos:
- Detergente
- Desengrasante
- Limpiador multiusos
- Paño
- Cepillo
- Esponja .
En casos de obstrucción más graves, se pueden emplear agujas metálicas específicas para este fin, las cuales se venden en ferreterías.
Cómo desatascar una estufa paso a paso
Si tu estufa está obstruida y quieres desatascarla tú mismo, sigue esos sencillos pasos:
Paso 1
Cierra el paso del gas y desconecta el cable de alimentación del enchufe.
Paso 2
Si has usado la estufa recientemente, espera a que se enfríen los quemadores.
Paso 3
Retira los salvamanteles -es decir, los soportes metálicos de las cacerolas- y los quemadores.
Paso 4
Con el lado suave de una esponja, usa un detergente multiusos para limpiar la estufa o anafe, luego retira el producto con un paño.
Paso 5
Usando la aguja de limpieza de estufas, frota el interior de cada uno de los orificios debajo de los quemadores, teniendo cuidado de no dejar caer la aguja hacia adentro.
Paso 6
Limpia los quemadores con detergente, empleando una esponja o un cepillo.
Paso 7
Si es necesario, aplica desengrasante. Si la suciedad no sale con estos productos, utiliza la aguja y destapa cada orificio.
Paso 8
Enjuaga y deja que los quemadores se sequen antes de volver a colocarlos en la estufa.
Si después de seguir estos pasos el problema de obstrucción persiste, busca un profesional especializado en este tipo de servicio.
Evita que los quemadores de tu estufa se tapen
El mejor consejo para evitar que una estufa se atasque es, precisamente, evitando que se ensucie. En la vida cotidiana, incluso si limpias la mayor parte de la suciedad que cae sobre la estufa, puede que eso no sea suficiente.
De esta manera, se pueden acumular restos de grasa y otros restos de comida en los quemadores. Para evitar que esto se convierta en un problema mayor y acabe obstruyendo la estufa, intenta limpiar todos los quemadores periódicamente.