Primavera y verano son épocas cada vez más calurosas en la ciudad, por ello es recomendable cohabitar con las plantas en el hogar, pues además de ser un estupendo ornato natural refrescan el ambiente. Incluso si tenemos poco espacio para grandes macetas, hay variedades de plantas que necesitan poca tierra o incluso solo agua para mantenerse vivas y brindarnos un respiro de la naturaleza.
Las suculentas son plantas muy queridas como ornato. Muchas de ellas no están familiarizadas entre sí, pues el nombre agrupa una gran variedad de plantas que tienen sólo la característica común de absorber mucha agua en sus hojas gruesas. Aloe vera, el mismísimo agave o el árbol de la abundancia son algunos ejemplos diversos del mundo de las suculentas.
Otra característica que las hace favoritas entre mucha gente es su alta capacidad reproductiva, que va de la mano de una resistencia a climas extremos y a sobrevivir con poca agua o tierra (ideal para quienes se olvidan de regarla con frecuencia). Por esta tríada de beneficios podemos encontrarlas en pequeñas macetas cuadradas de menos de diez centímetros por lado y de alto. Con este tipo de “macetitas” podemos crear una gran colección sin necesidad de mucho espacio: un lugar frecuente donde se colocan es al borde de la ventana, ya que precisan de mucho sol.
Por la poca tierra que tienen en estos casos es obvio que no tendrán mucho espacio para crecer. Si deseamos tener ejemplares más grandes debemos trasplantar la planta a una maceta mayor, donde probablemente no solo crecerá, sino que también le crecerán los famosos “hijuelos” a su alrededor, cuando alcance cierto tamaño (variable según la subespecie). Estos pequeños retoños se pueden dejar allí o llevar a otra maceta. El corte y traslado es mejor hacerlo durante la noche, para evitar que el calor impida la sobrevivencia de la planta: igualmente hay que regarla enseguida.
Entre las suculentas encontraremos ejemplares que no la pasarán tan bien en macetas pequeñas, como los agaves, pues siempre buscarán crecer más: o morirán en el intento o romperán la maceta en la que se encuentran si no los podamos de manera adecuada.
Con este tipo de plantas podemos adentrarnos a un área de la botánica estética muy peculiar: los bonsáis. Si bien este tipo de árboles pequeños se suelen trabajar con otras especies, hay una suculenta que por su característica se presta para acercarse a esta tradición: el árbol de la abundancia. Para hacerlo hay que podarlo con mucha frecuencia, ya que puede crecer desenfrenadamente.
Otras alternativas
Además de las suculentas que podemos tener dentro de casa en lugares donde les dé el sol, hay otro tipo de plantas que son buenas para interiores, al ser de sombra. Dentro del gran submundo de plantas que sobreviven solo con luz indirecta encontramos variedades que además sirven para refrescar el ambiente.
Entre ellas están los helechos, una gran familia con algunas variantes de hojas de mayor tamaño. Por ello, a diferencia de las suculentas, se recomienda tenerlos en macetas no tan pequeñas, para que las raíces se desarrollen sin problema. Una planta más que funge para refrescar el ambiente es la lengua de tigre, que sobrevive sin problema dentro o fuera de casa. Conocida popularmente como “teléfono”, esta planta puede extender sus ramas como trepadora, aunque su longitud dependerá mucho de la tierra con la que cuente. Una variante de esta planta sobrevive también solo en agua, donde desarrolla sus raíces. Como ornato, una bella planta de sombra son las violetas, un tipo de planta que florea con facilidad dentro del hogar y que no necesita tanta tierra para vivir.