Hacer de un lugar un espacio sofisticado puede parecer una tarea complicada, sobre todo para quienes no son especialistas. Sin embargo, no hace falta ser un profesional para lograr el objetivo de tener una composición llena de elegancia. De esta forma, es posible crear un baño de lujo con solo seguir algunos consejos o tips de decoración.
Si quieres un baño pulcro y aparentemente ostentoso, quédate hasta el final de este artículo y toma nota para poner en práctica tu proyecto soñado.
Mira estos consejos que se encuentran en diferentes tipos de baños de lujo e inspírate para comenzar una transformación total en su entorno.
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Y como menos es más, el minimalismo como un lujo
Primero, es importante aclarar que un baño elegante no necesariamente significa que el lugar deba estar lleno de rococó. Es posible desarrollar un proyecto refinado y, al mismo tiempo, limpio y minimalista.
Para ello, sigue el dicho de que “menos es más”. Da preferencia a artículos en colores neutros, muebles de líneas rectas y vajillas en formatos modernos. Este es un aspecto que es muy compatible con un pequeño baño de lujo , ya que da la impresión visual de un espacio más grande.
Inspiración clásica
Por otro lado, el baño clásico también puede tener su dosis de elegancia. La vajilla de formas redondeadas y el metal en tonos dorados aportan una sofisticación casi instantánea a la estancia. La iluminación corre a cargo de apliques llenos de detalles, colgantes y curvas.
Se recomienda que la inspiración para los muebles sea también clásica. Una cómoda Bombay o un aparador con patas estilo Chippendale pueden hacer el papel de encimera de lavamanos. Si tienes espacio disponible, complétalo con un medallón o una silla Luis XV.
Dale glamour
Este consejo es para aquellos que quieren un espacio lleno de glamour por todos lados. Aquí, la idea es dejar de lado el minimalismo y apostar por la luminosidad, los colores dramáticos, los estampados, los tejidos refinados y todo lo que le dé al baño la impresión de un vestidor de diva de Hollywood.
Un baño negro combina perfectamente con esta estética. El color se puede aplicar a paredes y pisos a través de papel tapiz, inserciones de vidrio, revestimientos de porcelana, granito y cerámica. Así, le das el merecido destaque a las demás piezas.
Para complementar, apuesta por espejos venecianos con marcos de metal, muebles forrados en terciopelo, candelabros, jarrones, bandejas plateadas y manteles en tonos oscuros, como negro, morado, grafito y rosa fuerte.
Una tina o jacuzzi
El modelo victoriano es sinónimo de bañera de lujo. La pieza, que se remonta al período en que la reina Victoria reinó en Inglaterra, es un clásico de la decoración. Debido a que no necesita instalación de mampostería, se puede transferir entre habitaciones con mayor facilidad.
Otra de las ventajas de la bañera victoriana es que está fabricada en hierro fundido, lo que garantiza que el agua se mantenga caliente durante más tiempo. Su acabado esmaltado aporta el brillo que exige la decoración de baños de lujo .