Desde el norte de Europa, Escandinavia es una región que abarca países como Noruega, Dinamarca, Suecia y Finlandia, mientras que el estilo escandinavo de la decoración tiene sus orígenes a principios del siglo XX de la mano del artista sueco Carl Larsson, quien representó en ilustraciones su vida cotidiana junto a su esposa Karin, quien también era artista.
Esta pareja vivía en la ciudad de Sundborn, en Suecia, y Karin creaba ambientes basados en sus conocimientos de diseño de interiores, los cuales eran muy modernos y distintos a las decoraciones de aquella época.
La casa de esta pareja de artista continúa siendo una referencia al día de hoy, y se encuentra abierta al público en un espacio con colores neutros, tejidos de lana en la mesa y muebles de madera escandinavos a juego con toda la composición de la casa.
Una vez que te hemos introducido brevemente a los orígenes y características de este estilo de la decoración, te compartiremos con más detalle de qué va el estilo escandinavo y cómo lo puedes sumar en casa.
Pon atención, y de ser necesario, toma nota de esta útil información.
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Origen del estilo escandinavo de la decoración
El estilo escandinavo es un estilo de decoración que tiene su origen en el norte de Europa en el siglo XX, y se basa en la comodidad y la sencillez. Usa solamente colores neutros y valora la naturalidad y la iluminación abundante en los espacios.
Paleta de colores escandinava
Los colores neutros son la base del estilo escandinavo y son los que garantizan ambientes luminosos, agradables y suaves. Las paredes blancas son las más comunes en este estilo, puedes combinarlas con otros tonos claros, pero el blanco siempre debe ser el color predominante en cualquier habitación.
Lo simple es la piedra angular de la decoración escandinava. Para no romper la luminosidad y tranquilidad de los espacios que siguen este estilo, pues optar por decorarlo con elementos naturales, como el vidrio, la cerámica, madera, plantas, lana y lino. Evita cargar espacios con detalles muy coloridos, y valora siempre el minimalismo. Recuerda: solamente lo esencial.
En este estilo de la decoración, la personalidad de los residentes debe evidenciarse en cada detalle. El objetivo es transmitir el día a día de la familia de forma sencilla y natural en la decoración.
Un diseño muy limpio
Los muebles perfectos para complementar los ambientes escandinavos, son aquellos que tienen características minimalistas, es decir, piezas sencillas, de líneas rectas y funcionales. Para romper con el blanco y aportar naturalidad a la decoración, vale la pena invertir en muebles de madera para este estilo. El contraste de colores neutros con el tono amaderado es perfecto para crear un ambiente acogedor en tu hogar.
Mucha iluminación
Valorar la naturaleza en la decoración es una de las tendencias que más fuerza ha venido tomando en todo el mundo, pero además de ser tendencia, la abundancia de iluminación natural aporta tranquilidad y calma a los ambientes, por eso es imprescindible en el estilo escandinavo.
Desde grandes ventanales, techos retractiles o corredizos y todo lo que deje pasar la luz natural es bienvenido en este estilo de decoración. Las lámparas de sobremesa y las lámparas también son geniales para componer ambientes escandinavos.
¿Pero tienes idea del por qué este estilo tiene tanta iluminación y valora tanto el blanco? Los días en la región de Escandinavia suelen ser muy cortos y, por lo tanto, necesitan mucha iluminación interior para garantizar un clima más agradable.