El lino es una fibra natural y orgánica, por lo que su principal atractivo como material para tapizar es que es amigable con el medio ambiente. Además, es antibacteriana y antialérgica por naturaleza, por lo que no genera peeling y puede durar muchos años como el santo sudario.
Asimismo, el lino se caracteriza por ser una tela hidrófila capaz de absorber la humedad, así como por ser bastante resistente, incluso más que el algodón y la seda. Mientras más se lava mejor aspecto tiene.
A las importantes características que definen a este textil es que es una fibra viva, lo cual significa que siempre se mueve dándole un aspecto de elegancia, sofisticación y ligereza incomparable a los muebles o artículos que estén forrados con él, lo cual lo convierte en una de las telas preferidas de los usuarios para tapizar.
Si estás interesado en conocer más sobre las razones detrás del favoritismo y popularidad que hay por el lino, en este artículo lo encontrarás.
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Las múltiples ventajas del lino
El lino es uno de los tipos de textiles que son ideales para las personas alérgicas, debido a que cuenta con propiedades antialérgicas. Es un tejido resistente y sobresale por su tejido con un gran calce sobre la espuma, dando un acabado uniforme.
Esta tela puede tener varias composiciones diferentes, como la mezcla de lino o completamente poliéster. Es el famoso simple y chic, y lo mejor es que su precio es variable y se debe tener en cuenta que tus muebles se verán como nuevos por muchos años, vale la pena la inversión.
Cabe resaltar que el lino cuenta con cientos de usos, siendo el principal hoy día la ropa de vestir, telas de hogar, cordeles, velas de barco, recubrimientos técnicos, filtros y de la resina de la planta, y hoy en no sólo se usa para tapizar muebles, sino también para fabricarlos.
Desventajas
La principal desventaja es para quienes tienen mascotas en su hogar, esto debido a que el lino tiende a atraer y acumular pelos, y al tener hilos, la tela se puede deshilachar si se tira.