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Palas, la herramienta básica para los cuidados del jardín

Hay diferentes tipos de palas para las labores en la jardinería, selecciona la adecuada para lograr un trabajo eficiente y de calidad

Con una buena pala en mano, cualquier trabajo de jardinería será mucho más fácil y eficiente. Dylan Nolte/Unsplash

Existen diversas herramientas que son esenciales para cualquier jardinero, y una de las más importantes es la pala. Esta herramienta es fundamental para cavar hoyos, plantar árboles y arbustos, así como para remover tierra y escombros. Sin embargo, no todas las palas son iguales, y es importante conocer las diferencias entre ellas para poder elegir la adecuada para cada tarea.

En primer lugar, tenemos la pala de punta redonda, que es la más común y versátil. Esta pala es ideal para cavar hoyos en la tierra, remover tierra suelta y trasplantar plantas pequeñas. La punta redonda permite que la pala penetre en la tierra con facilidad, y su forma curva es perfecta para levantar tierra y escombros.

Otra opción es la pala de punta cuadrada, que se utiliza principalmente para cavar zanjas y hacer surcos. La punta cuadrada permite que la pala corte a través de la tierra con facilidad, y su forma plana es ideal para nivelar el fondo de la zanja o el surco.

También existe la pala de punta estrecha, que se utiliza para cavar hoyos profundos y estrechos. Esta pala es ideal para plantar árboles y arbustos, ya que permite cavar un hoyo profundo sin dañar las raíces de la planta. La punta estrecha también es útil para aflojar la tierra dura y compacta.

La pala de trasplante es más pequeña que las anteriores y se utiliza para trasplantar plantas sin dañar sus raíces. Su forma redondeada permite excavar alrededor de la planta sin cortar sus raíces. Además, su tamaño reducido permite trabajar en espacios pequeños y delicados.

La pala de poda es una herramienta especializada que se utiliza para podar arbustos y ramas pequeñas. Su forma curva permite cortar ramas con facilidad y precisión, evitando dañar la planta. Además, su tamaño reducido permite trabajar en espacios pequeños y estrechos.

En ciudades montañosas se utiliza la pala de nieve que sirve para remover nieve y hielo durante el invierno. Su forma rectangular permite recoger grandes cantidades de nieve en una sola pasada, mientras que su borde recto y afilado permite raspar el hielo con facilidad.

Por último, tenemos la pala de jardín, que es una versión más pequeña de la pala de punta redonda. Esta herramienta es ideal para trabajos más delicados, como plantar bulbos y plantas pequeñas en macetas. La pala de jardín también es útil para remover tierra suelta alrededor de las plantas sin dañar las raíces.

Todas estas palas vienen en diferentes tamaños y materiales. Es recomendable elegir una con un mango cómodo y resistente, ya que esto facilitará el trabajo y reducirá el riesgo de lesiones. Una herramienta de buena calidad durará muchos años, por lo que su costo será más alto.

Saber más: Aprende a trasplantar tus plantas y extender su vida.

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