Vivir la experiencia de un spa puede ser uno de los mejores y mayores placeres de la vida. No se trata solamente de buscar una mejoría de salud o de aspecto, un spa puede ser también el sitio idóneo para conseguir paz, tranquilidad y relajación. Con todo, no siempre es necesario salir de casa para acudir a uno de estos establecimientos; siempre es posible crear su ambiente dentro del hogar.Si estás interesado en crear una habitación de relajación, te presentamos una lista de ideas prácticas que te ayudarán a lograr tu objetivo.
Lo primero es prepararte con una buena crema corporal y aceites esenciales para tus manos, pies, piernas, brazos, torso, espalda, hombros y cuello.
El baño
No hace falta disponer de una bañera lujosa, pero si se cuenta con una lo suficientemente grande para entrar en ella de forma completa, bastará. Lo esencial es la sensación de ir entrando poco a poco en la bañera —con agua caliente— para conseguir esa sensación única y relajante.
Tampoco es desventaja disponer de una ducha y no de la bañera (como en la mayoría de los hogares del país). En la ducha se pueden hacer contrastes de temperatura y con ello pasar del agua caliente a la fría de la ducha, y viceversa. Estos contrastes térmicos son ideales para relajar toda la musculatura del cuerpo y favorecen el cuidado de la piel.
Iluminación
Otro aspecto importante a la hora de crear un ambiente de spa en el hogar es dotarlo de una iluminación suave y relajante. Esto se puede conseguir de forma muy sencilla: a través del uso de velas (por ejemplo), colocadas alrededor de la bañera, en la repisa de un mueble de baño o en cualquier otro estante donde no se apague. Podrá parecer que la luz es insuficiente, pero creará un ambiente de relajación (aunada, sobre todo, al aspecto siguiente).
Los pies
Si no se cuenta con calefacción o un subsuelo relajante para producir calor bajo los pies, tanto al levantarse por la mañana como al salir de la ducha, puede ser de ayuda una alfombra de baño mullida, no sólo porque cumple con la función sino, también, porque si se elige bien le puede dar un poco más de color al baño.
La exfoliación
Por otra parte, una buena exfoliación estimula la eliminación de toxinas y permite la renovación de la piel. Se puede repetir esta dinámica a diario o hacerlo una vez por semana; en el segundo caso, se tendrá que invertir más tiempo para que la limpieza sea de verdad profunda.
Aromas
También en este caso se puede hacer uso de velas perfumadas para jugar con los olores ambientales. En este caso, lo ideal es procurar olores suaves y nada pesados o irritantes. Desde sales de baños hasta exfoliantes corporales pueden utilizarse, sin olvidar las lociones para el cuerpo. Todo tiene que oler bien. Y estos olores ayudan a que uno se sienta renovado y rejuvenecido (parte fundamental de la experiencia del spa).
Toallas y accesorios
Una vez que se sale de la ducha, lo natural es contar con un ambiente cálido y prendas esponjosas cercanas para envolverse en ellas: toallas exuberantes, batas acogedoras y zapatillas suaves, son algunas de las cosas que suele haber en cualquier spa, de modo que procura que en tu casa también dispongas de elementos similares.
Plantas
Esto contribuye a la relajación: el uso de plantas no sólo decora un spa; además de ofrecer muy buen aspecto, pueden ser de ayuda para la salud. Las plantas se encargan de purificar el aire y añadir oxígeno extra a tu espacio; además, cuando el vapor del baño aumenta, se desprende el aroma corporal, y eso crea una poderosa combinación de olores (plantas, aceites y el cuerpo).