Todo cuenta en el hogar y nada pasa desapercibido. Una cocina linda y armoniosa será el resultado de elegir los accesorios indispensables, útiles y que además vayan con la estética del espacio. En ese sentido, las vajillas juegan un papel importante. En la época de las abuelas y las bisabuelas, las vajillas fungían como elemento de decoración, eran un tesoro que nadie podía tocar, ni siquiera las mismas dueñas, salvo en momentos verdaderamente importantes que ellas consideraban usarlas y que lucieran en sus mesas.
Pero los tiempos han cambiado y si bien en las familias mexicanas las vajillas siguen siendo un valioso tesoro, éstas también se han ido adaptando a las necesidad de las familias, primero porque pasaban más tiempo en la calle que en casa y la practicidad era necesaria, pero ahora, tras la pandemia y el home office es habitual que los platos, los vasos, las tazas sean más requeridos en el hogar porque es ahí donde se pasa más tiempo, así que se requiere que los materiales sean más resistentes, ergonómicos y divertidos.
Pero, ¿cuál es la vajilla ideal para cada familia? Si es una pareja la que busca una vajilla, tiene qué pensar en cuáles son sus necesidades, si son muy sociables, tendrán que pensar en tener una vajilla que sea atractiva, para varias personas y que no sea tan costosa, en cambio, si son muy solitarios, no tienen que ser muy rebuscados porque la función primordial de los platos, los vasos y los utensilios será más básica que estética.
El sitio masferreteria.com, recomienda buscar vajillas por piezas sueltas. "No necesitas comprar una vajilla de cocina completa de cinco piezas si solo te interesan los platos llanos y los platos hondos. Las vajillas con piezas sueltas te permiten seleccionar y elegir exactamente lo que deseas. Así, el desembolso económico inicial será menor", resalta.
También adquirir una vajilla irá de acuerdo a la extensión de la cocina, pues si se compra una que ocupa mucho espacio, tal vez no será muy funcional, así que será importante tomar medidas de la cocina y checar los espacios de dónde irá cada cosa, para poder percibir qué tamaño de vajilla es el ideal.
Si en la familia, ya hay cuatro, seis u ocho personas, esto puede traducirse en que hay niños, y si es así, hay que pensar en platos, vasos y utensilios de plástico, o de materiales resistentes que no se rompan o vayan a lastimar a los pequeños del hogar si se les caen. Generalmente si se va a buscar una vajilla para el uso diario, hay que buscar un diseño atemporal y divertido, por ejemplo la combinación de colores en los platos o en los vasos.
Cuando mamá planea una cena navideña, de aniversario o de celebración por alguna graduación, vale la pena invertir en una vajilla de porcelana, si es minimalista, le dará un aire contemporáneo y atemporal, y comer en este tipo de vajillas harán sentir a la familia, los invitados y sobre todo al festejado, muy apapachados, se sentirán importantes y queridos.
Pero por sobre todo, tienes que elegir aquella vajilla que vaya con tu personalidad, que sea agradable utilizarla al momento de comer o compartir un rato ameno con tu familia.