Si tienes una freidora de aire, sabrás lo fácil que es usarla y lo útil que resulta, es una maravilla de la cocina que te permite preparar alimentos más saludables y en poco tiempo, sin embargo como todo producto nuevo, es común que surjan dudas en el camino por el descubrimiento.
Seguramente te preguntarás cual es la forma correcta de limpiar y lavar tu freidora sin estropearla en el proceso, pues bien aquí te mostramos una manera segura de hacerlo:
Lo primero que debes hacer es desarmar tu freidora, y no nos referimos a sacarle los tornillos, no te precipites, lo que queremos decir es que saques la sartén y la rejilla donde se coloca el alimento, sepáralas y lávalas individualmente.
La forma correcta de hacerlo es con jabón para trastes y una esponja suave, te darás cuenta que no necesitas tallar muy fuerte pues el teflón de la freidora es sorprendente.
Toma un trapo y prepáralo con jabón, (estando húmedo pero no para escurrir) limpia la freidora por la parte exterior de esta, cuidando que el jabón no se cuele por las rendijas.
Al final toma otro trapo limpio y humedécelo esta vez solo con agua, pásalo por toda su superficie para retirar el jabón y que quede reluciente.
Al final cuando la sartén y la rejilla estén secas las vuelves a colocar en su lugar y ya está.