Hoy en día se sabe que para tener buena salud hay que cuidar nuestra alimentación y optar por las opciones más saludables siempre que sea posible, pero a veces esta tarea se vuelve muy complicada cuando las opciones son tan pocas o no están al alcance de nuestros bolsillos.
Hay ocasiones en que no disponemos de la solvencia económica necesaria para comer pescado a diario, o por ejemplo, el tiempo mínimo que toma preparar un platillo completo y balanceado con las cocciones más saludables (libres de grasa como las carnes a la plancha).
Para estas situaciones, el mercado lanzó hace unos años un novedoso artefacto que a todos nos volvió un poco locos, se trata de las fabulosas Airfryer o lo que es lo mismo, freidoras de aire.
La simple premisa de poder freír tus alimentos sin usar aceite, ya nos atrapó a todos, y la realidad es que son muy fáciles de utilizar, y sumamente versátiles.
Aquí te traemos 3 platillos saludables que puedes cocinar haciendo uso únicamente de este artefacto:
Pollo con papas y pasta cocida
Para quienes tienen una freidora de aire en casa, sabrán que los alimentos pierden agua cuando son cocinados en la freidora, así que las famosas papas a la francesa suelen salir duras y secas, pareciéndose nada a las papas que tanto nos gustan.
Pero no es un problema que no tenga solución, el tip es remojar las papas ya cortadas y crudas en un plato con agua y sal al menos media hora antes de freírlas, de este modo mantienen la húmedad y quedarán más suaves una vez cocinadas.
El consejo para el pollo es el mismo, la cantidad de minutos que le tomará freírse, junto con los grados que deberás usar varía según la marca de freidora que tengas, pero nuestro consejo es estar checando el pollo cada 10 minutos para asegurar que no se cosa de más o se pegue al sartén.
Únicamente la pasta tendrá que ser cocida aparte en esta receta, pero tanto las papas como el pollo pueden freírse en menos de 20 minutos con la fabulosa airfryer.
Bolitas de Brócoli
Aunque con el nombre ya suena sumamente complicado de hacer, no podrías estar más equivocado. Solo necesitamos:
- Brócoli
- Dos huevos
- Queso de asadero o mozzarela al gusto
- Harina de avena (se consigue moliendo avena en un procesador de alimentos).
Lo primero que debes hacer es poner a cocer el brócoli en una olla con sal, cuando el brócoli está en su punto, que no esté aguado por haber absorbido agua de más, ni muy duro como para decir que está crudo, es el momento ideal.
Una vez que el brócoli se enfrió, lo colocas hecho pedacitos en un bowl y agregas los dos huevos junto con tres cucharadas de harina para la consistencia.
Revuelves muy bien los ingredientes utilizando las manos y comienzas a hacer pequeñas bolitas con la mezcla, les abres un espacio en el centro y agregas un poco de queso, las cierras y ya tenemos las croquetas listas para ser freídas.
Calienta tu airfryer a 180 grados y coloca las bolitas, en caso de contar con aceite en aerosol, rocía un poco las bolitas para que no se peguen a la freidora, déjalas freír por alrededor de 10 minutos, pero tienes que estarlas revisando cada 3 minutos para cuidar que no se peguen ni desparramen, y ya está.
Pollo a la parmesana
Esta es quizá la receta más deliciosa de las tres, y aunque suene laboriosa, es muy fácil de hacer, lo único que se necesita es:
- Una pechuga de pollo cortada en cuatro por la mitad para tener filetes gruesos
- Pan rallado
- Queso parmesano rallado
- 6 cucharadas de queso mozzarella
- Un bote de tu salsa para pasta preferida
- 1/2 taza de mantequilla derretida.
La elaboración es muy sencilla, coloca las pechugas en el plato con mantequilla para que se bañen en ella, en otro plato extendido agrega el pan molido con el queso rallado, revuelve y pasa las pechugas para empanizarlas. Mientras esto sucede pon a precalentar la freidora a 180 grados, por al menos tres minutos.
Cuando la freidora esté lista, rocía un poco de aceite en el contenedor de la freidora, coloca la pechuga y rociala de un poco de aceite también, déjala freír 4 minutos y después dale la vuelta, agrega la salsa y el queso mozzarella y deja freír por otros cinco minutos, pero mantente al tanto de que no se pegue. Y listo, un delicioso platillo servido en menos de 20 minutos.