Para hablar de la Guadalajara moderna es importante recurrir al legado de Erich Coufal Kieswetter, quien marcó las bases del estudio y desarrollo contemporáneo de la Perla Tapatía en su arquitectura.
Nacido el 11 de mayo de 1962 en Viena, Austria, y fallecido en 2021, Erich Coufal fue uno de los expertos clave en la fundación de la Escuela de Arquitectura de la Universidad de Guadalajara, que a finales de los años 40 y por invitación del ingeniero Ignacio Díaz Morales, dio sus primeros pasos junto a otras personalidades e iconos de la arquitectura y la docencia como Mathias Goeritz (Polonia), Horst Hartung Franz (Alemania), Silvio Alberti (Italia) y Bruno Cadore (Italia).
Una de las particularidades de Erich Coufal fue su apasionado enamoramiento por Guadalajara, una ciudad que comenzaba a mirar hacia el crecimiento y la aspiración cosmopolita sin olvidar sus tradiciones y clásicos barrios.
Tras concluir sus estudios superiores en arquitectura en Viena, Erich Coufal se instaló de lleno en la capital jalisciense y rápidamente se sumó al entonces y reciente “Movimiento Moderno”, con el que se buscaba transformar a Guadalajara hacia una ciudad vanguardista, estética, pulcra y funcional en cada uno de sus rincones de cara al siglo XX.
La trayectoria y legado de Erich Coufal Kieswetter se respaldan por más de 70 años de experiencia que lo llevaron a ser artífice de proyectos ambiciosos tanto en la obra pública como en la privada, y que al paso de los años sus creaciones y conceptos quedarían como referentes culturales, estéticos, turísticos y de identidad de la Guadalajara moderna, apostando siempre por integrar y dialogar a otras disciplinas creativas y conceptuales como la pintura y la escultura.
Una de sus principales obras es la Casa de las Artesanías Jaliscienses (a un costado del Parque Agua Azul), en la que marcaría uno de los elementos más característicos de su estilo con la utilización de la celosía de hormigón, además su pasión por la plástica quedaba de manifiesto al incluir un mosaico hecho por Roberto Montenegro y escultura de Carlos Mérida, idea que también se replicó en el Teatro Experimental de Jalisco, que en su exterior sumó a la escultura y al muralismo en su interior, con obras de Gabriel Flores con “Alegoría del teatro de México” y Oliver Seguin con la pieza “La comedia y la tragedia”.
Lograr que la ciudanía en su transitar cotidiano por la ciudad conviviera con la arquitectura era uno de los principales objetivos de Coufal y como muestra de ello queda de testigo su edificio construido en 1961 en la avenida Chapultepec en la finca 223, así como en el edificio Circunvalación (Circunvalación Álvarez del Castillo 1210)
Su visión contemporánea y la búsqueda de espacios funcionales también fue llevada al diseño de centenas de casas habitacionales, además de aventurarse a las obras de gran impacto visual como la Torre Minerva (Torre Moragrega) con 12 pisos, el Banco Industrial de Jalisco de 1962 (en Calle Libertad 200 y Av. 16 de Septiembre), y el antiguo edificio de la Facultad de Contaduría Pública de la Universidad de Guadalajara.